¿Atascado en una rutina?
¿Te sientes aburrido con tu actual estilo de
vida y, particularmente, de la labor comercial que realizas a diario? ¿Todos
los días haces las mismas cosas y de la misma manera? Tal vez te encuentres atascado
en una alarmante rutina, y es el momento de que busques y encuentres algo
nuevo. Hablando sólo de tu trabajo de ventas, quizás debas cambiarte de
empresa, cambiar de giro de negocio, cambiar de actividad distinta a la venta;
si decides quedarte en tu empresa en la misma actividad de ventas, quizá debas
enriquecer tus ideas y creencias, modificar tu forma de trabajar, adquirir
nuevos hábitos, nuevos conocimientos, dejar de ser empírico y volverte
profesional, dejar de hacer las cosas por pura intuición y pasar a hacerlas
sistemáticamente, etc.
La rutina es una anestesia que adormece
nuestra audacia, osadía y atrevimiento para asumir nuevas experiencias. Soy un
convencido que, todo el mundo quiere cambiar su situación, pasar a un nivel más
elevado de vida, de posición social, de cargo y obtener mayores ingresos, pero
no saben qué hacer y cómo hacerlo. Algunos se dedican a esperar pasivamente que la crisis pase, que
las cosas cambien para su bien; otras deciden hacer algo para que las cosas
nuevas que desean ocurran. Estas personas no se dejan amedrentar por las
crisis, más bien en ellas descubren nuevas oportunidades de negocio y de
crecimiento. Estas personas son conscientes de dos cosas que consideran
elementales: 1) En querer y hacer, está la real capacidad y 2) Si no se
obtienen resultados es porque no se está haciendo nada para conseguirlos.
Si hacemos una revisión de la historia de la
humanidad, de los negocios y de las personas que han logrado ambiciosos
objetivos que parecían imposibles, se puede observar que, el éxito contundente
sólo se obtiene con el uso de ideas, paradigmas, conceptos y principios nuevos;
no se consigue con más esfuerzo puesto en sus ideas y maneras antiguas. Pero,
no basta adquirir nuevas ideas y conocimientos; hay que aplicarlos en la práctica
con determinación y esfuerzo. Sólo en la práctica nos damos cuenta si nuestras
ideas funcionan o no, producen resultados o no. Entonces, si queremos salir del
aburrimiento producto de la rutina, tenemos que hacer cosas nuevas, basadas en
conocimientos e ideas nuevas. No hay otra manera de elevar nuestra esencia.
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