El vendedor político

 

Es común que un vendedor profesional conozca y practique de manera intuitiva o conceptualmente la política; la que practica tanto en su vida diaria como la política que tiene su empresa. La política consiste en defender intereses, ya sea del país, de una organización, de un grupo o equipo o, de uno mismo; y, se puede hacer política virtuosamente, no como comúnmente la vemos practicar. Erradamente, se ha llegado a considerar la política como algo sucio y llena de vicios; es un error. Cuando el vendedor logra que sus clientes le compren los productos de la empresa que representa, lo que está logrando es que la política comercial de la empresa se cumpla.

Valga la redundancia, pero tiene que volver a decirse: las ventas son consecuencia de practicar la política general de la empresa. Si no “ama” la política, va a ser un mal vendedor. La política, después de todo, es la manera en que se lidia con otras personas u organizaciones para cumplir con un objetivo, a la vez que se consigue defender y materializar los intereses de su empresa. Tome consciencia de lo siguiente; su empresa tiene una política comercial, una política de precios, una política de créditos y descuentos, una política para nombrar representantes o distribuidores. Como ejecutivo o vendedor, usted tiene una política que se expresa en sus ideas comerciales.

A veces puede ser frustrante y exasperante, e incluso puede ocasionar el abandono de un trabajo, pero el saber ser político es esencial para el ejecutivo de ventas, y también para los vendedores. Esta es otra forma de entender la política, o de ser un ejecutivo o vendedor político: el no pelearse con nadie evitando los conflictos, sino todo lo contrario, se busca armonizar; se esfuerza siempre en encontrar la manera de decir una verdad, pero sin herir ni ofender a los demás; se es respetuoso de las opiniones de los clientes a pesar que se discrepa con ellas. Todo este comportamiento político que logra cultivar el vendedor le da un poder sublime e invisible para lograr objetivos.